A partir de este mes de julio, el Hospital Universitario Son Espases ofrece musicoterapia a los niños ingresados en la Unidad de Cuidados Intensivos de Pediatría, gracias a la asociación Na Marga Somriu. Se harán cuatro horas semanales, repartidas entre los martes, los miércoles y los jueves, en las que el musicoterapeuta Pau Català visitará a los niños ingresados.

Esta nueva prestación viene dada por los buenos resultados observados por el equipo médico en las unidades de oncología pediátrica y de pacientes crónicos, donde ya se aplica esta terapia gracias a ASPANOB y a la asociación Lions de Calvià. Hay que decir que la ampliación de este servicio se inicia este mes coincidiendo con el proyecto de humanización de la planta UCIP y con el proyecto “Aula Oberta”, promovido por ASPANOB, que se hará los lunes y los jueves, además de las actividades en inglés los martes y los jueves.

Las sesiones de musicoterapia consisten en tocar instrumentos, componer, improvisar o cantar, pero también en técnicas pasivas, como escuchar música para fomentar la relajación del paciente. La musicoterapia actúa contra el estrés que pueden sufrir los niños en el momento del ingreso, un proceso que suele provocar tensión y miedo. Por ello se ha implantado como una terapia complementaria no farmacológica con el objetivo de dar apoyo psicológico a los pacientes para hacer más confortables el ingreso y la estancia.

Este no es el primer proyecto que realiza Na Marga Somriu en el Área de Pediatría de Son Espases para hacerla más cálida, acogedora y alegre: en los últimos años ha decorado el Hospital de Día Pediátrico y las dos terrazas de las unidades de hospitalización, ha acondicionado dos salas donde se imparten talleres creativos orientados a estimular la imaginación de los niños y destinadas también al descanso de los padres y de los familiares, y ha apadrinado durante seis meses a la payasa Zeladora Caracola, de Sonrisa Médica.